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04 julio, 2006

CANALIZACIÓN DE YESHUA - Julio 3

CANALIZACIÓN DE YESHUA
Alexiis – Julio 3, 2006
 
            Ayer, después de haber recibido el mensaje de Tobías, quedé con una cierta intranquilidad interna, no es de miedo, pero algo que no es común.
 
            Al haberme puesto en contacto con una amiga del Uruguay con respecto a lo que para mi representaban estos dos mensajes, el de Yeshua y luego ayer de Tobías, comentaba que en este momento sentía la necesidad de tener cerca un ser amado al cual abrazar, un ser físico. Lamentablemente mis dos hijas están muy lejos, así que tuve que conformarme con compartir mi inmensa alegría por teléfono o por mail.
 
            Es en esos momentos en los que más extrañé a mi compañero, a mi marido de casi 46 años, el que se que está activo del otro lado del velo, ya que he recibido mensaje e información por intermedio de otras personas, pero en ese momento hubiera querido compartir con él lo que me estaba pasando.
 
            Estaba pensando tanto en él, que de repente me surgió la intranquilidad de que si quería averiguar qué es lo que estaba revoloteando en mi pecho, y si llegaba a ser él que se comunicaba conmigo, sé perfectamente que no me lo hubiera creído y que me hubiera vuelto a encerrar en las murallas para no recibir mensajes.
 
            Me puse a mirar TV, estuve trabajando algo en la computadora, traté de acostarme temprano, pero solamente dormité a ratitos durante toda la noche, terminando de levantarme definitivamente a las 4,30. Me vestí, desayuné y sabiendo que a las 8,30 tenía una alumna, vi que no me quedaba otro remedio que sentarme tranquila y tratar de comunicarme con alguien para sacar esa opresión del pecho.
 
            ¿Quién es el que se quiere comunicar? Por favor indíquenme:
 
                                                            MENSAJE DE YESHUA
 
            Anita, no te preocupes, no te hemos tomado a mal el que ayer no quisiste recibir más. Comprendemos, comprendemos las ganas que tienes de comunicarte con tu marido y por otro lado la desconfianza que eso origina en vos.
 
            Lo entendemos perfectamente y por ese motivo, por el momento la comunicación no se va a establecer, hasta que vos te hayas afincado como canal y tengas mayor seguridad en tus propios sentimientos y en todo lo que pasa.
 
            Sabemos perfectamente que estos dos días pasados, han sido, como vos misma dijiste, que estás como un sifón a punto de explotar. No queremos que explotes, te necesitamos, te necesitamos sana y bien, es por eso que tenemos también la consideración. Entendemos y no te culpes por no haber querido hacer más ayer.
 
            Comprendemos perfectamente y dejamos que los tiempos se vayan acomodando, que todo esto se vaya encaminando para tu propio bien y para el de todos. Porque si no estás centrada y si no consigues el suficiente equilibrio interior, no te van a llegar de nuevo los mensajes y no van a servir para ser transmitidos.
 
            Quédate tranquila, amiga, quédate tranquila, te habla tu Maestro, tu compañero, tu amigo de los tiempos lejanos. Reconozco el esfuerzo que estás haciendo, el esfuerzo para poder cumplir con lo que es tu nueva meta. Todo lo que vos no habías pensado que alguna vez te iba a tocar, pero sí, era lo que arreglaste antes, era lo que arreglaste, pero que vos misma no te permitías creer.
 
            Ahora estás viendo, estás viendo que con un corto llamado que hiciste estás en condiciones de comunicarte conmigo, así que, quédate tranquila, ya va a llegar, ahora descansa, prepárate para tu alumna, prepárate para tu clase, para que puedas transmitir toda la luz que contienes.
 
            Te envuelvo en mi amor, como siempre, tu Maestro, tu Amigo, Yeshua.


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