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19 marzo, 2007

LA ACCIÓN A TRAVÉS DE LA NO-ACCIÓN....

El paso 20, “Acción a través de la no-acción, va mano a mano con el paso 19 “El poder surge del interior”, pero hay ciertos aspectos importantes que puedo añadir.

Hay un concepto en los escritos taoístas llamado “wu-wei”. Es la idea de que existe un flujo natural en la vida y en la naturaleza y que, alineándose con este flujo y separándose de la mente, uno puede permitir que las cosas descansen dentro de la simplicidad natural, para que se desarrollen sin esfuerzo a lo largo del tiempo. Permíteme que cite unas pocas líneas del Tao:

“La actividad perfecta no deja huella:
El discurso perfecto es como un tallador de jade cuya herramienta no deja marcas.

La puerta perfecta no tiene ni cerradura ni barrotes,
A pesar de eso, no puede ser abierta.”

En el arte taoísta, como en sus ideas, se ve la reverencia por la simplicidad; sus pinturas contienen unas pocas pinceladas, líneas simples, luz difusa, y sin fuertes contrastes de color. Ves la idea de wu-wei en su gracia sin esfuerzo, en la simplicidad y suave tranquilidad que es la característica del arte taoísta.

Originalmente, wu-wei o no-acción, se pensó que significaba estar en un monasterio meditando durante 30 años. Se dijo que haciendo nada podrías ganar todo. Sin embargo, en nuestros tiempos modernos, sentarse para siempre, realmente no funciona. Lo que podemos ver a través de esta idea de “acción a través de no-acción” es que el iniciado toma distancia, y eso le permite a él o ella tener poder.

No-acción es estar fuera de la emoción de la gente-la emoción colectiva- fuera de los deseos y las frustraciones del ego. Es la ligereza del toque que sale de la confianza, la gracia y el corazón sereno.

Por ejemplo, como dije antes, si quieres vender algo y quieres presionar a la gente, “Compra esto, compra esto”, eso es acción; es yang, es avanzar. Presiona a los demás. En contraste, hacerse atrás, subyugando tu ego a las necesidades de los otros es no-acción. Si eres un vendedor o manejas un equipo de ventas, tienes que tatuarte en la frente la idea de someter tu ego. Enseña a tus vendedores a vencer sus egos durante el tiempo suficiente para vender cualquier cosa que estén vendiendo.

Un vendedor que entra en una tienda y empieza a hablar de sí mismo y a presionar sobre el cliente avasallando, provoca que la gente se ponga a la defensiva. “¿Quién es este tipo?” se preguntan. Se vuelven esquivos. Necesitas enseñar a tu vendedor a situarse psicológicamente por debajo del cliente y quedarse callado; deja que el cliente hable, preguntándole acerca de él o de su negocio.

Este individuo ya no estará a la defensiva; la gente está encantada de hablar de sí mismos, especialmente los hombres. A ellos les gusta hablar de sus triunfos. Así que permíteselo.

Conforme los clientes hablan, descubres quienes son y qué necesitan. Al final, si no puedes satisfacer alguna de sus necesidades, no llegarás muy lejos. ¿Quién es el cliente? Bueno, ella es una compradora, digamos, en una cadena de almacenes de hardware, pero antes y principalmente es una mujer, tal vez madre, una paracaidista, una escaladora y colecciona tapetes.

Probablemente no ve su trabajo como encargada del almacén de hardware como el objetivo de su vida. De hecho, puede situar su trabajo muy abajo en la lista de cosas que realmente tienen un significado emocional en su vida.

Una vez que has averiguado quién es, y te has referido a ello, y has escuchado y dicho unas pocas cosas que animan, tendrás que descubrir sus necesidades o deseos. ¿Cuáles son sus consideraciones? Empieza con una simple pregunta personal como:

¿Cuántas veces al año haces paracaidismo? Pronto averiguarás que está deseando irse y que está excitada porque ha reservado un fin de semana para hacer paracaidismo en las Montañas Rocosas. En este punto, los dos lleváis 15 minutos charlando y nadie ha mencionado el hardware. La has tratado como un ser humano y te has mantenido atrás, venciendo la necesidad de tu ego de hablar de ti mismo y vender cerraduras y tornillos.

Manteniéndote por debajo de la gente, puedes venderles más fácilmente porque les das apoyo. Es una forma de amor. Cuando alguien te da su dinero, está dejando una pequeña parte de su seguridad. Pagar tiene el efecto, a un nivel subliminal de la mente profunda, de causar inseguridad. Cada céntimo les lleva en teoría más cerca del colapso financiero y la muerte del ego. Si pago este dinero, tendré menos. ¿Seré capaz de alimentarme? Si no como, moriré etc., etc.

La gente tiene que sentirse segura para transferirte su dinero.

Nunca lo olvides. Como hacer que se sientan seguros no es lanzarse sobre ellos desde arriba (acción, yang), diciéndoles lo maravilloso que es tu producto y lo maravillosos que eres tú. En vez de eso, trabaja primero sobre su zona de confort, mantente callado la mayor parte del tiempo, llevando las cosas sin esfuerzo preguntando cosas (no-acción, yin). Cuando hables asegúrate de decirles que todo es confortable, seguro, cálido; que están a salvo. La gente necesita oír eso. Trabaja sobre su energía positiva y diles la maravillosa suerte que está a punto de descender sobre ellos en estos tiempos tan positivos y excitantes. Entonces, y sólo entonces, menciona los
tontos tornillos.

Así que, la no-acción es realmente el acto de observar el flujo y reflujo de los acontecimientos y permanecer por debajo de la vida.

Puede sonar extraño porque te hablé anteriormente de ser más grande que la vida. Ser más grande que la vida es un sentimiento interior. Ahora, intelectualmente, vas a situarte por debajo. Vas a hacerte humilde en la terminología del ego, y subyugarte a las necesidades de los otros, de tus clientes, antes que las tuyas, lo suficiente para asegurarte de que ellos están bien y que tú puedes hacer la venta. Separándote del ego ves dentro de la humanidad de la gente; comprenderás pronto lo que quieren. Comprender lo que la gente desea es un modo de hacerse muy rico muy rápidamente.

Aquí va otro ejemplo. Si tu cuerpo se siente mal, en vez de entrar en la emoción, correr como un loco a por las pastillas y llamar al médico (acción), da un paso atrás y comprende que eres eterno y no puedes estar enfermo; estás en wu-wei. Estás en la no-acción de centrarte a ti mismo primero y pensar y sentir lo que es mejor que hagas aquí, lo que necesitas hacer realmente es reajustar tu anterior equilibrio. El malestar es ying; a veces viene para ayudar a que veas cómo equilibrar el yang de tu vida. La gente muchas veces se pone enferma por quemar su poder vital con demasiada actividad, y yang.

Cuando estás equilibrado estás siempre en el lugar correcto en el tiempo correcto; cada cosa que pasa puede ser percibida en esa luz.

Si estás equilibrado te mueves en un patrón de probabilidades que te previene del dolor y las heridas. Para algunos, la vida parece un juego de la ruleta rusa dejado al azar. Algunos se hieren y otros no; algunos mueren, otros no; algunos enferman, y otros no.

Por supuesto, todo viene de una exteriorización de los sentimientos de la gente. Una vez que tus sentimientos son sanados, ya no hay más ruleta rusa.

Cuando aceptas la responsabilidad de tu vida, puedes comprender el significado profundo del desequilibrio, y querrás investigar profundamente las razones. Apresurarse para arreglar la presa cuando ya ha colapsado y hay inundación, no funciona realmente. Eso quema un montón de energía. La fuente es donde debes estar; allí puedes arreglarlo todo. Gradualmente, tu realidad externa se manifestará de acuerdo con tus nuevos patrones internos.

Así que, wu-wei es entender que no tienes que forzar. Cuando la gente avanza rápidamente, tu das un paso atrás; cuando ellos corren, tu caminas; cuando ellos gritan y piden atención, tu permaneces tranquilo. Si no estás desesperado por tus necesidades y deseos, nadie podrá moverte. Tienes todo el tiempo del mundo. Dí a ti mismo varias veces al día, como un mantra: “Estoy en equilibrio.

Tengo todo el tiempo del mundo”.

El mundo exterior que ves es realmente sólo una extensión de tu sueño interior. Es duro comprender esto al principio, pero una vez que lo asumes, te ahorra muchos sinsabores.

Digamos que estás tratando con un amigo difícil. Quieres que cambie su actitud y te apoye en un proyecto que planeas. Acción sería intentar convencerle, estar sobre él, vencerle lógicamente con las buenas cualidades que tu proyecto ofrece. O también podrías manipularle mediante la culpa, remarcando que si fuera buena persona, querría participar. Te lo debe, se lo debe al pueblo, o a la sociedad. Le ayudaste el año pasado así que debe ayudarte ahora, bla , bla ,bla. Esos argumentos son acción.

No-acción es permanecer dentro de la mente de alguien y averiguar:

¿cuál es la postura de esta persona? ¿Qué está diciendo realmente?

¿Por qué no querría apoyarme? ¿Qué necesita? ¿Quién es él? ¿Dónde está el objetivo de su vida? ¿Cuáles son sus planes?

Por tanto la no-acción es el acto de ponerte tú y tus necesidades al servicio de esta persona, dejando tu proyecto a un lado y, momentáneamente, entrar en su mente y descubrir quién es. Lo siguiente es que verás bastante claramente que él también está asustado, con demasiado poca energía para sí mismo, así que no pierdas tu tiempo intentando persuadirle. Si necesitas ayuda, aparecerá. Si no lo hace, te las arreglarás por ti mismo o bien aún no ha llegado el momento de meter tu energía en ese proyecto particular. Resérvalo.

Todo el mundo quiere algo. Sé que suena horrible, porque nos gusta pensar en un mundo donde la gente no quiere nada. Pero el hecho es que todo el mundo quiere cosas, un montón de cosas. Esto no es ni bueno ni malo; es como son las cosas. Los que tenemos que observar son los que dicen: ”no quiero nada” porque suele significar que no quieren algo pero sus planes están escondidos, ocultos. Si realmente no quisieran nada, no necesitarían decirlo.

Normalmente lo que la gente quiere es reconocimiento y respeto, quieren ser alabados; ser vistos como el buen tipo, buscan aprobación y admiradores. Quieren que te unas y les hagas sentir más seguros.

Recuerda, todos andamos por aquí en el mundo real evitando la muerte. Esa es la principal función del ego. No necesariamente la muerte física, sino la muerte de un ritmo, de una idea, de algo a lo que estamos acostumbrados. Dale a la gente lo que quiere. Si quieren que les apoyes, hazlo. Si necesitan sentirse seguros, apóyales. Llena las necesidades de sus egos y ellos vendrán a ti sin esfuerzo.

No-acción es un modo diferente de ver las cosas. Es decir: primero iré al interior. Mejor que construir una muralla que te proteja, vas a tu interior y te sientes seguro. Si emanas solidez, no necesitas muralla. Cuando la gente dice “Estamos construyendo una muralla; los mongoles vienen; ¿por qué no nos ayudas?” tú dices:

“No necesito una muralla porque el día que vengan los mongoles, yo no estaré aquí. Estaré contento de ayudarte en tu muralla si así lo quieres, pero, por favor, no te lo tomes personalmente si me voy unos días antes de que esté acabada si te parece bien”.

¿Por qué es posible esta actitud? Porque conforme la energía del avance de las tropas mongoles comienza a caer sobre la ciudad, la sentirás por adelantado. Te dirás a ti mismo: “Mis sentimientos sutiles parecen extraños hoy. Siento algo raro en las cercanías. La noche pasada la puesta de sol se veía muy roja, los pájaros estaban extrañamente callados, y hay más polvo en el aire que habitualmente. El ejército mongol no puede estar lejos. Es hora de visitar a mi amigo George en Devon y beber té y charlar de caballos”, y te vas.

Por lo tanto, es atrayendo y no empujando- un equilibrio entre acción y no-acción. Y, por supuesto, es del silencio de tu meditación, la sacralidad de tu vida, como creas la no-acción. Vayamos al paso 21, que es “Dedicar tu vida al camino sagrado”.

Stuart Wilde. "33 pasos para reclamar tu poder interior"
Traducido por Yarisa.
Colaboración Amorosa de Yarisa para la Humanidad.
Sobre Stuart Wilde ir a www.stuartwilde.com/ (Está en inglés)

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