.

03 junio, 2008

¿Apocalipsis ahora?

Giorgio Bongiovanni

Apocalipsis proviene de una palabra griega que significa “revelación”. En el Nuevo Testamento, el libro del Apocalipsis de San Juan es considerado el único texto bíblico de carácter profético. El Apocalipsis fue siempre asociado al final de los tiempos y a un tipo de escenario que parecía solo posible en películas y que nadie desearía tener que vivir. Lamentablemente el Apocalipsis tan temido comienza a materializarse en la realidad nuestra de cada día. Prominentes científicos reunidos tardíamente por distintos organismos internacionales, diagnostican de modo unánime dramáticas consecuencias para los años por venir. Mientras todo parece estar perdido, entrevistamos a Giorgio Bongiovanni, estigmatizado y un verdadero profeta de estos tiempos de revelaciones, con la esperanza de unir la realidad con las profecías reveladas en el Apocalipsis bíblico.

EL APOCALIPSIS Y LA REVELACION

El contenido de los mensajes que usted presenta en sus distintas conferencias y libros es muy similar a lo que se expresa en textos proféticos que nos hablan de la proximidad del Apocalipsis. ¿Las profecías inexorablemente se cumplirán?

Las llamadas profecías son en sí mismas advertencias y las mismas se cumplirán solo si la humanidad no hace nada para revertirlas. Es decir, si no se revierte el actual curso de la humanidad inexorablemente le daremos validez a dichos textos proféticos. Utilizando un lenguaje evangélico, llegó el momento en el cual la humanidad tiene que arrepentirse, redimirse y pedir perdón al Creador por todo el mal que le ha provocado a la madre Tierra y a toda forma de vida que aquí se desarrolla.

Desgraciadamente muchas de estas profecías ya se están cumpliendo y el tiempo para tomar conciencia se está terminando. Pero aún podemos aliviar este innecesario sufrimiento.

¿Cómo interpreta usted el término “Jinetes” utilizado en el Apocalipsis bíblico?
Los Cuatro Jinetes del Apocalipsis son, sin lugar a dudas, los 4 elementos: Tierra, Aire, Fuego y Agua, los que como anticuerpos planetarios comienzan a purificar la enfermedad planetaria llamada hombre. Terremotos, tsunamis, huracanes, inundaciones y el calentamiento global, entre otros, comienzan a sentenciar los horrores que la humanidad cometió contra el orden de la creación. El ser humano que nació concebido como co-creador de la obra de Dios, se comporta actualmente como un depredador de aquello que Dios le puso a su disposición para desarrollar su potencial de amor, compasión y preservación de todo lo manifestado. El hombre está poco a poco matándose a sí mismo. Nosotros no estamos en la Tierra, somos parte de la Tierra y de lo creado.

¿Qué es o quién es el Anticristo?

El Anticristo es todo aquello opuesto al Cristo. Si fundamentalmente el Cristo es amor y ello incluye amor por todo lo manifestado, el Anticristo es odio; y ese odio toma forma en toda la invención humana que destruye la creación y que aleja al ser humano de su estado más puro, que es justamente el del amor. El sistema perverso de la economía descontrolada, la marginación social, la pobreza, la industria armamentista, el hambre, las guerras, la depredación ambiental, el apego a la materia, el abandono de las formas de espiritualidad; todo esto es parte del Anticristo.

Todas las profecías y antiguos textos religiosos nos hablan de señales en el cielo. ¿Qué es lo que se manifestará, cómo y cuándo?

Hay que prepararnos para un evento extraordinario. En realidad son dos eventos en uno, que ya están comenzando a manifestarse. Los ángeles de ayer son los extraterrestres de hoy. Estos seres de luz se están dejando ver en los cielos de todas las ciudades del mundo. El amor no impone, ofrece, y es por esto que a pesar de que su misión está motivada por el amor y el servicio al Cristo, no deciden intervenir. Ellos respetan nuestro libre desarrollo como especie. Nuestros desaciertos son desgraciadamente nuestra propia elección como curso evolutivo. Ellos lentamente se están mostrando como parte de un futuro contacto entre estas civilizaciones de amor y la humanidad. Esto será la señal que anunciará el evento Crístico, la segunda venida de Jesús, la cual, como figura en el Apocalipsis, se dará en tiempos de caos y de grandes eventos de purificación planetaria. Unos días antes que el Katrina asolara Nueva Orleans, Steve Burns, un americano, filmó una increíble cruz en el cielo de Florida, formada por 7 extraños objetos voladores, justo en uno de los sitios por los que avanzó el huracán. Estos eventos, al igual que las muchas manifestaciones masivas de más de 100 objetos que frecuentan verse en muchos lugares del mundo, serían de una gran utilidad para el despertar de la conciencia de la gente, si no fuera que los grandes conglomerados de noticias hacen todo lo posible para que estas expresiones no lleguen a conocimiento público. Estas apariciones, al igual que las tremendas explosiones solares sin precedentes que están sucediendo y otros fenómenos celestes, son lo que los textos bíblicos llaman “señales en el cielo”.

No todos en este mundo viven equivocados y retroalimentando a este sistema apocalíptico. ¿Debe pagar la humanidad entera un alto precio por las decisiones equivocadas de unos pocos? ¿Cuál es su opinión al respecto?

Como acabo de expresar, existe una gran manipulación de la opinión pública. Este es el principal motivo por el cual la gente vive desorientada y ajena de las advertencias celestes y del potencial peligro al que se enfrenta la humanidad entera. Las personas están perdidas y disgregadas, siguen corriendo detrás de falsos ideales impuestos por estos poderes. Una de las tareas primordiales en estos últimos tiempos es informar la verdad con la finalidad de acelerar la toma de conciencia y que los hombres logren reorientar sus vidas hacia los verdaderos objetivos de la evolución y no delegar más el poder en quienes los manipulan y engañan. Pero también existe una triste verdad: las personas poco hacen por ayudar a su semejante, no actúan en servicio del prójimo y su ambición los lleva a consumir más de lo que necesitan realmente. Hay una parte de responsabilidad que nos toca a cada uno de nosotros. Todos somos víctimas, pero también todos somos victimarios de alguna manera. La gran mayoría de nosotros aceptamos vivir apáticamente, creyendo que nada podemos hacer por cambiar la realidad del mundo. Dominadores y dominados, que no han hecho mucho para dejar de serlo, vivirán por igual las consecuencias de haber dejado avanzar hasta este punto la actual situación planetaria.

Muchos expertos opinan que los cambios climáticos son parte de un ciclo natural cósmico que se da cada 26.000 años aproximadamente, ¿coincide?

La creación tiene sus leyes y los cambios que vivimos son parte de grandes ciclos evolutivos del Universo. El problema es que el hombre, con su accionar regresivo y depredador, va en contra de estas leyes de la naturaleza, impidiendo que estos cambios se efectúen tal como el Creador y su orden lo programa. Toda consecuencia será equivalente en intensidad a la causa que la generó. Vivimos una etapa evolutiva dual, en la cual existen opciones en el camino que elegimos seguir, pero si elegimos el camino equivocado éste nos conducirá a un precipicio. Un solo camino nos permitirá seguir adelante en la evolución. Parece que elegimos el equivocado y estamos cerca del precipicio, pero todavía tenemos la oportunidad de alcanzar un retome que nos puede depositar en el camino correcto. El Apocalipsis es una visión profética del futuro, una advertencia que, al parecer, debe ser revertida antes del fin de este ciclo de 26.000 años que culmina en 2012. El 2012 parece ser el tiempo límite que la humanidad tiene ante sí para revertir su actual curso. Después del 2012 la humanidad recogerá el fruto de su siembra. El planeta indefectiblemente sufrirá un redimensionamiento hacia otra escala superior de evolución. El ser humano como especie tiene la oportunidad única de evolucionar junto con la Tierra. Está en nuestro libre albedrío cumplir o no con este designio divino.

No hay comentarios.: