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13 febrero, 2009

Te lo imaginabas.........

La idea de la existencia de un mundo oculto bajo la superficie de nuestro planeta es, ciertamente, muy antigua. Innumerables cuentos populares y tradiciones orales en muchos países del mundo hablan de pueblos subterráneos que han creado un reino de armonía y alegría que no se ve perturbado por el resto de la humanidad.

Con el paso de los años se ha denominado a este mundo Shangri-La, Shamballah o Agharti (también conocido como Agharta). Tomando la leyenda en su forma más básica, se dice que Agharti es un misterioso reino subterráneo situado en alguna parte bajo Asia, y vinculado con los otros continentes del mundo mediante una gigantesca red de túneles. Estos pasadizos, en parte formaciones naturales y en parte debidas al trabajo de la raza que creó la nación subterránea, proporcionan un medio de comunicación entre todos los puntos. Se dice que sólo algunos altos iniciados conocen la localización exacta de estos pasadizos y sus medios de entrada. También se dice que hay manuscritos pertenecientes a la civilización perdida de la Atlántida, e incluso de un pueblo anterior que estuvo constituido por los primeros seres inteligentes que habitaron la Tierra.

Se dice que las pocas entradas que quedan abiertas en la superficie se encuentran en el Tibet, Siberia, Africa, América del Norte y del Sur, y en islas remotas que fueron en un tiempo las cimas montañosas de la Atlántida.

Con la historia de Agharta concuerda un tema incluso más misterioso, el de la extraña fuerza conocida como el PODER VRILL, que ha estado relacionado desde hace tiempo con el mundo subterráneo. Se dice que esta notable fuerza proporciona un poder casi ilimitado a cualquiera que la posea.


América del Sur no fue meramente una extensa zona colonizada en su costa oeste por los Lémures, y en la costa este por los Atlantes, también existía una tercera civilización: el Imperio Amazónico que estaba más allá de sus más famosos y conocidos vecinos en los océanos cercanos.

Los archivos de la historia de Mu y de su caída, del destino de Atlantis, y de los secretos del Imperio Amazónico (conocido en las leyendas con el nombre de Paititi), existen en cámaras especiales que están ocultas en las Grandes Ciudades Perdidas del inexplorado interior de América del Sur.



LEMURIA

Lemuria fue una antigua civilización que existió antes y durante el período de la Atlántida. Físicamente se cree que existió en un enorme continente a lo largo del Sur del Océano Pacífico, entre Norteamérica, Asia y Australia. Lemuria es también conocida como Mu o la Madre Tierra de Mu. Se cree que existió aproximadamente desde 98.000 años antes de Cristo, al 8.000 antes de Cristo y durante el período de la Atlántida. La gente de Mu pasó por muchas faces durante su civilización. Se sabe que eran personas muy avanzadas cultural y espiritualmente.

Aproximadamente 14.000 años atrás, la cultura conocida como Lemuria, estaba en pleno apogeo. Había otras culturas como la Atlántida que también estaban en su apogeo. Los profetas de la cultura lemuriana comenzaron a percibir que algo habría de cambiar. Recibieron información acerca de que la Tierra pasaría por cambios dramáticos, provocados por un Gran Diluvio. La gente sagrada de Lemuria estaba muy conectada con la Tierra. Ellos eran los ancestros de los nativos americanos y esto es muy importante ya que los conocimientos de Lemuria fueron preservados por ellos.

Como los lemurianos estaban preparados para el cataclismo que se avecinaba comenzaron a enseñar acerca de los secretos de la Tierra y de la humanidad a todas las personas que fuera posible. Ellos creían que de este modo la información sería almacenada en las células de los cuerpos humanos y por lo tanto la información jamás sería olvidada. También comenzaron a almacenar información en los cristales. Estos eran guardados a grandes profundidades en la Tierra para que la información fuera preservada. A su vez los antiguos lemures comenzaron a crear mapas con detalles muy precisos de los túneles subterráneos que existían entre los diferentes puntos de poder en el planeta.

Sabían que recibirían una señal diciéndoles que era el tiempo de ir a esos túneles antes de que el Gran Diluvio llegara. Por eso se prepararon durante miles de años para ser los guardianes sagrados de los secretos de la Tierra. Y esto debían hacerlo antes de que se produjera el Gran Diluvio, de lo contrario la historia entera de la humanidad y las sagradas enseñanzas lemurianas se perderían para siempre.

Finalmente llegó el momento y se dirigieron a los túneles. Esto ocurrió aproximadamente un año antes del Gran Diluvio. Mientras estaban bajo tierra tuvieron que aprender a vivir allí y hacer uso de lo que la Tierra les ofrecía para poder sobrevivir. Es así como construyeron grandes comunidades basadas en el amor y la comprensión. Durante aquel año realizaron la tarea final; preservar todo el conocimiento que era necesario resguardar.

Cuando llegó el Diluvio, toda la gente que se encontraba bajo tierra se salvó de la catástrofe, Los que estaban en la Tierra perecieron. Cuando el agua cesó, salieron a la superficie. La Tierra que ellos conocían ya no era la misma. Y este emerger de la Tierra es el punto de partida que los nativos americanos utilizan para hablar de la historia de la Creación. En un sentido muy literal ellos emergieron de la Tierra. Muchos de los nativos han perdido la memoria literal de este emerger, pero dentro de los más altos rangos de chamanes este conocimiento se perpetúa.

Este es el punto de vista de los nativos americanos. Pero ellos no eran los únicos que habitaban los túneles. Toda la gente con elevados conceptos espirituales del planeta estaban allí. Los aborígenes australianos y aquellos que después se convertirían en los druidas en Inglaterra estaban allí preservando sus conocimientos.

Los druidas preservaron la información de los antiguos habitantes de la Atlántida. Pero los nativos de la zona del Pacífico, incluyendo Asia, fueron los que preservaron la información correspondiente a Lemuria. Estos nativos aún hoy guardan dentro de sí los sagrados conocimientos. Mucho de esto es conciencia y mucha información está almacenada en el subconsciente. La tribu Ainu, de Japón es uno de los grupos que preservaron estos conocimientos. Todos juntos formaron un grupo humano basado en la cooperación con el fin de preservar las sagradas enseñanzas.

Los profetas sabían que cuando el cataclismo pasara la humanidad se alejaría de las sagradas enseñanzas. A su vez también sabían que durante este tiempo las enseñanzas permanecerían ocultas. Cuando el ciclo llegara a su fin, las enseñanzas volverían a emerger y serían transmitidas a cada una de las personas. Y esto es lo que está ocurriendo en este momento.

Si visitamos lugares sagrados como el de los nativos americanos, Perú o Egipto es porque estamos sintiendo que estos conocimientos ancestrales comenzaron a emerger para contactarse con nosotros y debemos encontrar el modo a través del cual nuestra memoria pueda recordar. Y lo podemos hacer indagando en nuestra sabiduría espiritual. Los antiguos maestros nunca sintieron la necesidad de hacer que la gente creyera en las enseñanzas sagradas. Sin embargo esto pasó después del Diluvio. Los antiguos tenían su propia sabiduría espiritual la cual nunca se ponía en discusión.

Aquellas creencias básicas estaban basadas en la aceptación de un poder supremo y del amor y respeto por nuestros semejantes y por la Tierra. Estos son los conceptos básicos de la espiritualidad.

Los nativos americanos hacían algo que se conoce como "La danza de la lluvia". Hoy el significado de la ceremonia se ha perdido. Actualmente la creencia es que la danza hacía llover. Sin embargo en aquellos días la danza de la lluvia era mucho más que eso. Los nativos no hacían la danza para que lloviera sino porque podían de este modo conectarse con la energía del medio ambiente y formar parte de él y celebrar la lluvia. Y esto marca una sutil diferencia con la creencia popular, porque su rito significa sentirse "Uno" con la Madre Tierra.

El Monte Shasta está considerado como un vórtice energético y al que se asocia con las civilizaciones intraterrenas. Existe la creencia de que los lemures habitaron en el interior del Monte sagrado. Por ello cuando hablamos de Lemuria y su relación con el Monte Shasta nos referimos al nacimiento de las antiguas civilizaciones indígenas americanas (descendientes directos de Lemuria).



En cada etapa definida por una Raza hay tres Centros Mayores, suprafísicos, intraterrenos, que, actuando triangularmente, componen una tríada energética. De los componentes de esa tríada, uno es el regente de todos los demás centros planetarios en aquella etapa. Actualmente, los Centros Mayores son Aurora, Erks y Miz Tli Tlan, pero la regencia está a cargo de Miz Tli Tlan, cuyo principal Espejo se localiza en la región intraterrena de los Andes peruanos.

En el período lemuriano Iberah fue el centro regente del planeta, habiendo precedido a Shamballa y Miz Tli Tlan. En la Lemuria, Iberah también se manisfetó en la superficie, como el Templo de Ibez, en una región correspondiente a la parte central de lo que hoy es América del Sur. Actualmente Iberah tiene uno de sus Espejos activos en la conocida laguna Iberá, en la Argentina, pero su trabajo no incluye en este momento, el contacto directo con la humanidad de superficie. Iberah trata con la sustancia matriz del planeta, con la esencia misma de la materia. Por ahora, su energía es demasiado potente para esta humanidad, que no soportaría el contacto directo con ella. Es por eso que, actualmente, el centro Aurora, actuando como transformador, es el intermediario entre la energía de Iberah y el hombre de superficie.

Más allá de la tríada formada por los Centros Mayores, existen otras triangulaciones energéticas que tienen como objetivo el desarrollo planetario.

Iberah, conjuntamente con Erks y con Anu Tea, compone el triángulo de energías guardián de los "Misterios Sagrados", misterios acerca de los cuales se habló en todos los tiempos.

Los centros intraterrenos interactúan de diversas maneras, manifestando por medio de cada una de ellas cualidades específicas de la energía que incide sobre la vida planetaria. Así como la luz blanca posee en sí todos los colores del espectro visible, pero al reflejarse se revela como un color específico, los centros trabajan con todas las energías, no obstante, en la mayoría de los casos, las tareas que les corresponde realizar necesitan de la expresión de una u otra energía característica. Tal necesidad equivale a un flitro, determinando la cualidad a ser manifestada. Por lo tanto, para cumplir el propósito evolutivo, los centro se interrrelacionan y, según la composición formada por ellos, provocan efectos distintos sobre la vida planetaria.

Los centros existen en potencia desde la formación del planeta. Son Espejos que deben ser dinamizados para entrar en actividad. Actualmente Erks es una referencia espiritual para la vida de superficie, un punto de contacto del hombre terrestre con la Jerarquía. Anu Tea desempeñó una función equivalente durante su manifestación en la Cuarta Raza.

Los centros trabajan creando una emanación análoga a la secreción de las glándulas endócrinas en el cuerpo físico humano, que es fundamental para el funcionamiento del cuerpo planetario. Cada uno tiene su modo de actuar, su sonido, transmite su característca específica y diferenciada. Cada centro es único, original y genuino. Cada centro activa diferentes matices de la vida del planeta. En el hombre, el funcionamiento de sus centros etéricos y de sus glándulas está ligado con el grado de su despertar interior o, en otras palabras, con el nivel en que su consciencia está polarizada – y un proceso semejante ocurre con los núcleos internos de la Tierra.



El punto de equilibrio entre todas esas corrientes de energía se encuentra en Miz Tli Tlan. Punto central del conjunto formado por ellos, representa el "sacrificio" de la energía divina en el mundo de la materia y, al mismo tiempo, su consagración.


La participación activa de Miz Tli Tlan permite el surgimiento de la centella de vida, formando nuevas coyunturas, triangulares, base energética para el servicio manifiesto:



Aurora Miz Tli Tlan Iberah

Mirna Jad Miz Tli Tlan Erks

Lis-Fátima Miz Tli Tlan Anu Tea



Miz Tli Tlan emerge como centro director de la energía de construcción-destrucción para el planeta, en lo que se refiere a la introducción de patrones arquetípicos cósmicos que deben ser impresos en la órbita terrestre.

El Templo de Ibez fue la primera expresión material del centro que hoy conocemos como Iberah. Ibez tiene una de sus ramificaciones, en el plano etérico, en la Sierra del Roncador, región central del continente sudamericano. Allí, en planos sutilies, y no en el físico, se desenvuelve hoy un trabajo de preparación de la nueva Raza. Siempre que uno de los Espejos de Iberah se manifiesta en la superficie, debido a la cualidad de la energía por ellos irradiada, los seres del reino animal y vegetal en las áreas circunvecinas muchas veces asumen el papel de guardianes, y adquieren mayores proporciones físicas. También en esas áreas ocurre con mayor facilidad la desmaterialización y materialización de cuerpos.

El centro intraterreno Anu Tea fue despertado y activado a mediados del período atlante, cuando comenzó a actuar como Espejo, irradiando su energía inclusive hacia la superficie del planeta. Entre los centros planetarios activos, Anu Tea es el único que se encuentra en Oriente. A su trabajo estuvieron coligados el islamismo y el sufismo, entre las muchas "vestiduras" que la energía espiritual trajo al expresarse en las culturas orientales. Anu Tea tuvo importante participación en el traslado de la energía regente del planeta desde la antigua Shamballa hasta Miz Tli Tlan, y su posición geográfica entre esos dos centros le permitió actuar como intermediario. En el idioma Irdin (Idioma intergaláctico) Anu Tea significa "Tierra de los grandes hombres".

Anu Tea trabaja directamente con la energía del Quinto Rayo, energía ligada al aspecto inteligencia, y de esto deriva su expresión como conocimiento y ciencia, manifestada por los pueblos antiguos. Anu Tea funcionó, desde su despertar, como base de trabajo para seres provenientes de planetas más evolucionados que la Tierra; en ese centro esos seres podían ancorar su energía. Hacia Anu Tea eran conducidos, en cuerpos sutiles, los miembros más avanzados de la humanidad de superficie. Allí, les era dada formación interior, y sus cuerpos sutiles eran estructurados de modo tal que pudieran operar, por medio del vehículo físico, como prolongaciones de la energía de ese centro, donde quiera que estuviesen. Uno de los símbolos de Anu Tea es la estrella de cinco puntas.

Anu Tea no se materializará en el plano físico, en esta etapa. Al igual que otros centros, trabajará a partir de los niveles internos. Sin embargo, con él está coligada una importante y gran entrada al mundo intraterreno, localizada en el mar de las Filipinas, entre Australia y el Japón.





La ciencia ha demostrado que nuestro planeta está surcado por grandes túneles y amplísimas cavernas, cuya formación no se ha podido determinar si fueron producto de los cambios geológicos o construidos por antiguas civilizaciones hoy desaparecidas. Las entradas a este mundo subterráneo son innumerables y se encuentran en todos los continentes y aún bajo el agua.

La existencia de lagos de profundidad desconocida, o cavernas con accesos que aparecen y desaparecen inexplicablemente dan origen a infinidad de historias.

La leyenda del cerro Uritorco cuenta que hace mucho tiempo hubo un cacique de la tribu de los comechingones, que gobernaba con justicia a su pueblo y que dominaba las fuerzas de la naturaleza y del cielo porque poseía conocimientos que había obtenido en una profunda cueva que solo él conocía.

También se cuenta que el caballero Parsifal custodio del Santo Grial viajó a esta Montaña Sagrada buscando el Bastón de mando o Piedra de la sabiduría. Y es esta historia del siglo XII la que indujo en este siglo a científicos, místicos, aventureros, e incluso expediciones militares a la búsqueda de la Ciudad de ERKS.

La literatura hermética habla de ciudades subterráneas comunicadas entre sí habitadas por seres muy evolucionados algunos de origen terreno y otros no.

Dicen que ERKS, "Encuentro de Remanentes del Kosmos Sideral", es una ciudad de sabiduría con una energía especial que la llaman energía "ono ozone", los seres que supuestamente la habitan saben utilizarla y nos ayudan a recibir esos conocimientos. La clave es la armonía en el movimiento, debemos ser coherentes con lo que hacemos, decimos y sentimos.

La metafísica habla de la ciudad intraterrena de ERKS, palabra que según la ciencia hermética, corresponde al idioma cósmico, y , lugar donde se dará la obra futura de regeneración de la especie humana. Se dice que en su interior se encuentra el Templo de la Esfera y los tres espejos por los cuales hay un intercambio cósmico de datos con todas las galaxias y que también pueden seguir al detalle la vida de cada ser humano que habita en este planeta, sobre todo de aquellos que están en vías de desarrollar un intelecto superior de acuerdo a las leyes de armonía cósmica.

Se habla de la ciudad de Erks como una ciudad metafísica, un mito o una leyenda, pero ¿y los ruidos bajo la tierra del Uritorco?. Miles de personas en la zona, han escuchado de diferentes maneras a lo largo de todos estos años, ruidos y movimientos de tierra. Que explicación tiene esas estruendosas y fuertes explosiones de sonido grave. ¿ De donde vienen los ruidos que se asemejan a martillos neumáticos como si hubiese una maquinaria fabril funcionando debajo ?. ¿Cómo entender esos ruidos de engranajes como si hubieran unas inmensas compuertas que se abren y se cierran?

El metafísico brasileño Trigueirinho escribió un libro llamado ERKS (1989), donde relata un encuentro con Sarumah en Buenos Aires. En esa oportunidad Sarumah le entregó fotos, anotaciones y un pequeño manual ilustrado, conteniendo los documentos básicos de Erks. Con ese material escribió Erks, mundo interno en 48 días, ya que según afirma, era necesario que se divulgara con urgencia su contenido.





Un buen ejemplo de cómo se realiza la selección para la pertenencia a Erks la describió Elsa Tear. Ella, luego de presenciar la ceremonia en Los Terrones donde asistió el doctor Terrera, regresó a su habitación en el hotel de Capilla del Monte donde se alojaba, pero estando despierta y a oscuras, aclara, la habitación se iluminó y ante sus ojos comenzó a proyectarse un paisaje hermoso. Vio parques y jardines repletos de flores de colores vivísimos desconocidos en la Tierra. En medio de ese paisaje vio también a monjes vestidos con túnicas blancas, que caminando en grupo conversaban en voz baja. Dijo Elsa Tear para describir lo que vio: "Era una belleza y un placer ver todo ese espectáculo. Era la más lograda representación de la armonía entre los reinos, la convivencia perfecta entre animales, vegetales y hombres. Todos se respetaban y compartían con amor y equilibrio el mundo que les tocó habitar. No sé si fue real pero mi habitación se había hecho enorme. ¿Hice un viaje astral a un paraíso perfecto? No lo sé. Asustadísima y preocupada encendí la luz. Todo desapareció. Pero al apagarla nuevamente estaban otra vez allí, ante mis ojos abiertos, los paisajes hermosísimos".

Sin embargo, a lo largo de la noche se comenzó a sentir descompuesta del estómago y pronto sintió náuseas que la llevaron a vomitar continuamente. Cuando apagaba la luz volvían esas imágenes que de pronto se transformaron en una danza de triángulos de brillantes colores. Encendía la luz y se arrastraba al baño para seguir vomitando. Pero la mujer pese al malestar que la dominaba tuvo la certeza de que esas imágenes que veía pertenecían a seres de otra dimensión. Gran parte de la noche la pasó en ese estado de inquietud, pero al mismo tiempo de felicidad. A la mañana siguiente escuchó que golpeaban a la puerta. Preguntó quién era, no hubo respuesta, pero al abrir la puerta, y para sorpresa de Tear, apareció Sarumah. Ella intentó explicarle el malestar sufrido a lo largo de la noche pero Sarumah ya sabía todo, y le dijo: "Eso es lo que esperábamos, la estamos limpiando". La mujer sorprendida y con desconfianza entonces preguntó: "¿Usted quién es?", a lo que Sarumah contestó algo que cambiaría la vida de la mujer. Le dijo: "Nosotros somos el Cosmos. Usted está programada desde siempre. Toda su vida fue observada y computarizada. Hemos seguido toda su vida a través de nuestros espejos. Como se aceleraron los tiempos, tuvimos que acelerar también su proceso de depuración. Me refiero al cumplimiento de su karma. De ahí todos sus inconvenientes, problemas y sufrimientos. Tuvimos que hacerle cumplir y pagar los sufrimientos que debería haber cumplido en varias vidas futuras. Todo en esta vida, para completar su karma. Yo sólo soy el portero de Erks, sigla que significa Encuentro de Remanentes del Kosmos Sideral. Ustedes serían los descendientes de antiguos habitantes de otros mundos, esparcidos por el cosmos, que ahora son buscados para recuperar su herencia cósmica, y ser reintegrados a la Confederación Intergaláctica. Yo no soy quien lo hace, yo solamente soy el encargado de juntar a determinados seres humanos que estamos buscando, para reintegra ríos al Plan del Cosmos. Son nuestros hermanos mayores, avatares, maestros de muy elevadas dimensiones, comandantes de naves, conocidos en la Tierra como arcángeles y diversas jerarquías del comando intergaláctico ASTHAR quienes los detectan mediante la energía ono-zone, energía inteligente, amorosa, la que es conocida por los yoguis del Oriente como "prana", pero en realidad el prana es una de las manifestaciones de esta energía primaria. En la Tierra están las llamadas Islas Blancas, en las cuales se encuentra esta energía, como en el Cerro Uritorco, pero solamente responden a tan elevada vibración los seres humanos que están sintonizados con ella -que en realidad son los seres que estamos tratando de agrupar. Del grupo de cuarenta personas que estuvimos anoche en el Cerro, usted es la única que fue imantada, porque respondió a esa energía. De allí su descompostura: la estuvimos limpiando".

Para Tear esta revelación abrió un profundo canal de recuerdos en su mente, porque de pronto se descubrió agradeciendo la presencia de Sarumah, como si se tratara de un verdadero rescate. La curiosidad de la mujer aumentó y entonces le pidió a Sarumah que se manifestara en su verdadero aspecto. Entonces Sarumah contestó: "Por ahora no podría mostrarme ante usted como soy realmente porque usted se desmayaría. Por su vibración actual no lo podría soportar Yo soy iridiscente. Soy un ser de luz. Usted va a ser transmutada. Tenemos que aumentar más el giro de su vibración, entonces podrá estar en condiciones de ser llevada al mundo intraterreno de Erks y luego la vamos a llevar en nuestras naves a conocer otros mundos".

Sarumah insistió en que debía ser transmutada y para eso le aseguró que los hermanos mayores le prestarían toda su ayuda. Pero gran parte del esfuerzo debía surgir de ella. A la necesidad de volverse vegetariana, también se le recomendó que despertará el hemisferio derecho de su cerebro, que es donde anida la espiritualidad del hombre, la intuición, la creatividad, el arte y el amor.

El resto de la preparación, escribió Tear, duró tres días con sus noches, donde se sucedieron reuniones y nuevas experiencias, siempre en el Valle de Erks, donde también se le explicó que residían poderosas energías de polaridad masculina que hasta ahora habían estado afincadas en Oriente, en el Tíbet y en las ciudades suprafísicas intraterrenas, como Shamballa, Agharti, entre otras que eran de la Cuarta Dimensión. "En América despertarán las nuevas ciudades intraterrenas de la Cuarta Dimensión, cuya polaridad femenina, comienza a actuar ahora, y cuyo centro está en América, considerándosela el Paraíso prometido. Solamente en Sudamérica, ya han despertado de su estado de letargo, tres importantes centros energéticos: Erks, Miz Tli Tlan, en la selva amazónica del Perú y Aurora, en Salto, Uruguay, los cuales forman una triangulación de poderosísimo magnetismo y energía trasmutadora ono-zone" concluyó Sarumah.



Aurora es una civilización intraterrena que auxilia al ser que habita la superficie de la Tierra en su integración con el mundo en el que vive y con la dimensión extraterrestre, para que reconozca sus metas profundas y superiores.

Existen otros centros intraterrenos, integrados a Aurora: ERKS, que está habitado por una civilización compuesta de seres intergalácticos que contribuyen al perfeccionamiento de la raza humana, presente en la superficie de la Tierra. La misión de ERKS y AURORA es controlada por un centro aún mayor, también intraterreno, denominado MIZ TLI TLAN, el cual ordena la evolución del plano de mutación de todo el planeta.

Las tareas de estos tres centros se desarrollan en perfecta integración con el plano cósmico, bajo las órdenes del Consejo Superior Celeste Central.

AURORA, indica una apertura hacia la cura cósmica. Cuando alcanza al ser humano, su impulso puede engendrar armonía, equilibrio y salud, con tal de que la verdadera fe esté presente y actuando en el individuo. La fe, energía que proviene de la cuarta dimensión, produce, cuando se la reconoce, transformaciones profundas e inesperadas en los mundos en general y en la consciencia tridimensional del hombre.

En cuanto a los procesos por los cuales un hombre ingresa en los mundos intraterrenos, se puede decir que varían según el estado de consciencia en el que él se encuentra. Aunque las aberturas hacia esos mundos pueden ser vistas en el plano físico, entrar a través de ellas no es exactamente un hecho físico.

AURORA está ubicada en el interior de la Tierra, en la región de Salto, en el Uruguay.

AURORA es parte de la tarea actual de purificación del mundo. Desde otro ángulo, AURORA es un templo inmaterial para ser usado por sanadores.

La energía de AURORA se llama BRILL.

AMHAJ entidad de AURORA, afirma que la entrada en el Servicio es reconocida a través de algunas señales que manifiesta el aspirante:

La renuncia al pasado.

La búsqueda y el encuentro con el Ser Interior dentro de sí mismo.

El rechazo al temor

La ausencia de condena

La dedicación exclusiva al trabajo para el futuro de la raza

La alegría generada por su sacrificio total para el bien del mundo

El esfuerzo para estar en los mundos lejanos, teniendo presente su propio camino, ya predestinado.

Según AMHAJ, aquellos que presentan tales características están maduros para el Servicio.



El Señor Aramu-Muru, como uno de los maestros de Lemuria, fue delegado por la Jerarquía para llevar los rollos sagrados que estaban en su posesión junto con el enorme Disco Solar de Oro a la zona montañosa de un lago recién formado en lo que es ahora América del Sur (Lago Titicaca). Allí guardaría y mantendría el foco de la llama iluminadora en el Monasterio de la Hermandad de los Siete Rayos.

El gigantesco Disco Solar de Oro estaba sujeto por cuerdas de oro puro en un santuario situado en el Templo más importante de la Luz Divina de la Madre Patria de Mu. Frente al disco, sobre un altar, que era un pilar tallado en un bloque de sólida piedra, resplandecía la eterna Luz blanca de la cristalina Llama Maxim, la Divina Luz Ilimitada de la Creación. Alrededor del año 30.000 a.c. la Luz Maxim se apagó en el Altar a causa de la maldad de algunos sacerdotes-científicos del Gran Mu. El Disco Solar permaneció en su santuario, hasta el momento de la destrucción final y de su hundimiento en el mar.

Este Disco no era usado solamente como objeto de adoración, ni tampoco como la representación simbólica de nuestro Sol Central. Era también un instrumento científico, y el secreto de su poder provenía originalmente de la época de la Raza de los Mayores, se lo usaba conectado a un complejo sistema de espejos de puro oro, reflectores y lentes para producir la curación en los cuerpos de aquellos que estaban en el Templo de la Luz Divina. Además de todas estas funciones, el Disco Solar era un punto focal para la concentración de calidad dimensional. Cuando el disco era golpeado por un sacerdote-científico, que entendía su manera de operar, establecía ciertas condiciones vibratorias que podían producir intensos terremotos y, si proseguían por mucho tiempo, provocar una modificación en la rotación de la Tierra misma. Cuando se lo hacía armonizar con el peculiar modelo de frecuencia de una persona podía transportar a dicha persona a cualquier lugar donde quisiera ir con sólo crear la imagen mental del viaje. Era, por consiguiente, un objeto de transportación.

El Disco Solar de Oro de Mu no estaba hecho de oro ordinario, sino de oro que había sufrido una transmutacion.

En servicio infinito y con amor incondicional

Emilio Alvarez
etzacury3@hotmail.com

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